Todo lo que necesitas ver en Cabo de Gata by Ale McSeven

Su intento de exprimir cada momento y llenar su vida de experiencias únicas le hicieron escaparse a Níjar, en la provincia de Almería, donde disfrutar de unos días de relax en familia. En esta ocasión escogieron el Hotel Barceló Cabo de Gata, ubicado en primera línea de playa, con vistas al Mediterráneo y a las puertas del  Parque Natural de Cabo de Gata.

Antes de irse, la blogger Ale McSeven sació su curiosidad mirando todas las opciones que ofrece el hotel y para su sorpresa la realidad superó sus expectativas. Durante su estancia disfrutó de una maravillosa habitación con vistas a una de las cuatro piscinas en las que pudo jugar con su hijo Mateo y tomar el sol todo el fin de semana. Y es que, según nos cuenta Alejandra Cuenca, a Mateo le dio tiempo hasta a tener una piscina favorita. Uno de los lugares más divertidos, ideales para los más pequeños de la casa, con animación y shows que entretuvieron tanto a Mateo ¡que perdió el miedo al agua!

Pese a la extensa variedad de actividades que propone el hotel, a Ale McSeven una de las cosas que más le gusta hacer es comer. Nuestra influencer se define como una verdadera “comilona”  donde no solo quiere degustar los mejores manjares de la tierra si no que lo ve como un momento de reunión con las personas que más quiere.  Por eso no es de extrañar que le costara tanto decidirse entre la amplia oferta culinaria del  Barceló Cabo de Gata. El restaurante tipo buffet Mare Nostrum, recién reformado con una terraza con vistas al resort; el restaurante Carta Club de Mar, especializado en platos nacionales con el tradicional sabor almeriense; El Coral, situado en el lobby; el chiringuito El Faro y su bar Club de Mar. Todos  ofrecen un servicio cinco estrellas para disfrutar por todo lo alto de una experiencia culinaria de diez.

Amante de la decoración, Alejandra Cuenca no perdió detalle de la espectacular estética del hotel. Le dejó impresionada el enorme hall, decorado con un estilo boho - industrial en el que se integraba a la perfección El Corral, uno de los bares en los que disfrutar de un break. Sin embargo el Club en el que más se divirtió no tenía oferta culinaria. Se trata del Barcy Club una zona infantil en la que Mateo se lo pasó en grande. Desde talleres para crear instrumentos musicales hasta manualidades pasando por sesiones de cine para los más pequeños y todo ello supervisado por la atenta mirada  de los monitores.

Pese a viajar en familia,  nuestra blogger Ale McSeven no perdió la oportunidad de regalarse un momento para ella en el Spa Wellness del Hotel. Un masaje aromático, el cual te envuelve desde el mismo instante en el que entras y te invita a quedarte, y un circuito de aguas termales con piscina de hidroterapia, sauna finlandesa, baño turco, duchas de sensaciones, piscina contracorriente y zona de relax equipada con dispensadores de agua y limón y naranja pusieron el broche final a una escapada en familia para repetir.