La Granada de Lorca: 100 años de su primera obra
No te pierdas qué ver en Granada siguiendo la huella que dejó en la ciudad el poeta Federico García Lorca ¡Te contamos todo!
"En Granada se limita el tiempo, el espacio, el mar, la luna, las distancias… hay necesidad de limitar, de domesticar los términos inmensos". Así definió Federico García Lorca su tierra, hace justamente 100 años, en su primera gran obra: Impresiones y Paisajes. Un siglo después de su publicación y 120 años después de la muerte del poeta y dramaturgo más conocido de la Generación del 27, la experiencia de ver Granada a través de los ojos de García Lorca continúa siendo sobrecogedora. En el 2018 se celebró el `Año de Lorca´ y por eso te proponemos visitar la ciudad de su mano y conocer más sobre el legado del poeta en el nuevo Centro Lorca de Granada, que albergará unos 5.000 documentos pertenecientes al poeta entre cartas, partituras, pinturas… Una ocasión única para vivir esta cautivadora capital a través de la `ruta lorquiana´; tras los pasos de quien mejor la supo entender y amar.
La primera de las obras de Federico García Lorca celebra su 100 aniversario y te invita a conocer Granada
Original de Fuente Vaqueros, este pueblo de la vega granadina influyó decisivamente en la obra de Lorca como más tarde lo harían los paisajes de Granada, donde vivió con su familia desde los once años y hasta comenzar la universidad en Madrid. Fue a raíz de su partida a la capital que descubrió su pasión por la literatura, tras una sucesión de viajes por España en los que escribió su primer libro de prosa, Impresiones y paisajes (1918), dedicado a su viejo maestro de música Antonio Segura. Las críticas a esta temprana obra -tenía sólo 20 años- no le fueron nada favorables, pero el granadino ya había decidido que la suya era una vocación por la poesía y el teatro. Nadie ha podido quitarle la razón.
Qué ver en Granada siguiendo la estela de Lorca
Que ver en Granada en la otra Ciudad Nazarí los sonidos de la guitarra llenan miradores y plazas, marcando el ritmo alegre de una ciudad donde el tiempo discurre de manera distinta al resto del mundo. Todo queda suspendido en una particular belleza: la de los campos de olivos que salpican la provincia, las vistas del mirador de San Nicolás, deslumbrado por la silueta de Sierra Nevada, el encanto y las mil historias de las callejuelas del Albaicín... Aquí abundan las rutas de generoso tapeo con sabor morisco y se encuentran maravillas arquitectónicas como la Alhambra o la Catedral, un casco histórico en el que perderse desde el céntrico Barceló Carmen Granada, y todo ello enmarcado por el perfil montañoso de sus parques nacionales y surcado por el río Darro. Una estampa inspiradora, donde pasado y presente se funden y a la que solo se puede desear volver.
“Mi sitio está entre estos chopos musicales y estos ríos líricos que son un remanso continuado”, explicaba Federico García Lorca en una carta a su amigo Melchor Fernández Almagro, y de esa frase escrita en 1921 no podríamos rebatir una palabra, pues la misma calma incombustible se respira hoy en rincones como La Loja. Un pueblo que atesora entre sus murallas iglesias, conventos y casas testigos de otro tiempo, conscientes de que la armonía con el entorno es la mejor salvaguarda de la identidad y donde el bienestar y el ritmo pausado son casi palpables. Por eso no sorprende encontrar en este auténtico enclave andaluz un lugar de las características de La Bobadilla, a Royal Hideaway Hotel: comprometido con el turismo sostenible y profundamente ligado a sus raíces granadinas, en el corazón de un olivar único.
Las 'rutas lorquianas' imprescindibles en tu viaje a Granada
Sendas que son el pretexto perfecto para conocer los lugares emblemáticos de la vida del poeta. Los puntos están señalizados con una reseña histórica explicando su papel en la trayectoria de Lorca y ofrecen algunos de los versos dedicados o redactados en esos precisos rincones de la región.
Huerta de San Vicente, la residencia donde veraneaba Lorca
Una acogedora casita de campo con hermosos jardines que era la residencia de veraneo de la familia desde 1926 hasta 1936, a las afueras de Granada, hoy acondicionada como casa museo donde se exponen objetos originales del poeta y recuerdos de la familia con los que asomarse a su vida. La entrada a la residencia es de por sí inspiradora: un camino lleno de árboles frutales, con rosales y granados, cuyo perfume acompañó la infancia de Lorca.
Casa Acera del Casino, la casa de la familia Lorca
Tras mudarse primero a la Acera del Darro, en la ribera del río, la familia García Lorca tuvo en esta dirección su segunda vivienda. Junto a Puerta Real, esta plaza embellecida por edificaciones al estilo europeo fue costeada por la burguesía local al taparse esta parte del Darro y explanarse en el arenal de ambas márgenes, convirtiendo el entorno en punto neurálgico de la ciudad.
Plaza de los Aljibes de Granada, turismo y literatura a los pies de la Alhambra que inspiró a Lorca
Este enclave, situado junto a la Alhambra y con unas impresionantes vistas del Albaicín y el Sacromonte, animó a Lorca a embarcarse en el Concurso de Cante Jondo en 1922, considerado el mayor acontecimiento cultural de la España de su tiempo, y promovido tanto por el granadino como por Manuel de Falla, cuando ambos genios coincidieron en Granada.
Café Alameda, testigo de las tertulias de García Lorca
En el actual restaurante Chikito, antiguo Café Alameda, el más célebre entre 1915-1929, se reunían bohemios e intelectuales de toda índole y se celebraba la tertulia ‘El Rinconcillo’. Federico García Lorca fue uno de sus habituales durante casi 15 años, apostado en aquél rincón de la escalera que subía a los billares y que hoy ocupa una escultura de Lorca, a tamaño natural. Desde el Barceló Granada Congress, este restaurante queda a escasos minutos y merece la pena visitarlo porque la comida es excepcional.
Museo Ángel Barrios, la huella flamenca del Federico más íntimo
Levantado sobre lo que era la taberna El Polinario, en la fortaleza de la Alhambra, el que ahora es el Museo Ángel Barrios fue testigo de las reuniones de intelectuales artistas flamencos en la época. Por supuesto, Lorca las frecuentaba, especialmente en las calurosas noches de verano que los jardines de la fortaleza mitigaban.
Aquí surgió la idea de celebrar en Granada el Concurso de Cante Jondo de 1922. Además, el edificio guarda una importante colección de enseres personales, instrumentos musicales, dibujos, pinturas, acuarelas, partituras… Recuerdos y testimonios de una época fascinante de la historia de Granada.
Plaza del Campillo, el lugar donde Federico García Lorca estrenó Mariana Pineda
En esta céntrica plaza se encontraba el café Alameda (conocido actualmente como restaurante Chikito) y el hoy ya desaparecido Teatro Cervantes en el que el 29 de abril de 1929, Lorca estrenó Mariana Pineda con Margarita Xirgù. Este teatro, que abrió sus puertas en 1810 bajo el nombre de Teatro Napoleón, fue derruido en 1966.
Centro Federico García Lorca, un lugar que visitar en Granada para conocer más al poeta
En la plaza Romanilla se ubica el Centro Federico García Lorca, el centro cultural destinado a la conservación y difusión de las obras del autor en la que esta primavera se exhibe la exposición ‘Una habitación propia. Federico Gracia Lorca en la Residencia de Estudiantes, 1919-1936’. Allí se ha reunido el legado del poeta, unos 5.000 documentos entre cartas, pinturas, partituras, recuerdos, vestuario... que se encontraban en la Residencia de Estudiantes de Madrid.