Montelimar Beach

Los viajeros que busquen unas idílicas vacaciones de sol y playa tal vez no valoren Nicaragua como un posible destino, pero eso sería un error. El país ha sido nombrado uno de los mejores destinos turísticos del mundo debido a sus muchos atractivos, entre ellos al Resort Barceló Montelimar. Con más de ocho kilómetros de costa virgen, este lujoso hotel cuenta con una extensión de más de 300.000 metros cuadrados de naturaleza exuberante. Las instalaciones de los hoteles en Montelimar ofrecen lujos de primera clase, tales como piscinas de formas naturales, senderos bajo los cocoteros, palapas de paja para relajarse y restaurantes elegantes. Y sobre todo, los hoteles de la playa de Montelimar ofrecen intimidad y aislamiento. Ubicado a una hora en coche de Managua, la capital del país, Montelimar es un refugio contra las preocupaciones mundanas. Sin embargo, eso no significa que esté aislado. Los hoteles de Montelimar ofrecen Wi-Fi, salas de reuniones y servicios de restaurante que hacen que las reuniones empresariales y sociales funcionen sin problemas. Los planificadores de bodas y lunas de miel ayudan a las parejas para que todo salga perfecto, y las familias quedarán encantadas con el entretenimiento destinado a los niños.

Los huéspedes curiosos de los hoteles de Montelimar quizá se pregunten por los orígenes de este paraíso virgen. El área fue una vez la finca de la familia Somoza, los líderes dinásticos que gobernaron Nicaragua durante 44 años. Los Somoza obtuvieron la tierra después de declarar la guerra a Alemania durante la Segunda Guerra Mundial y confiscar la tierra a sus propietarios alemanes. Nicaragua y Alemania nunca lucharon entre sí, lo que lleva a pensar que lo que la familia Somoza quería realmente era la propiedad de esta hermosa franja de playa del Pacífico. El último Somoza huyó del país en 1979, escapando de las violentas protestas contra el liderazgo opresivo de la familia. Se dice que escapó desde la pista de aterrizaje privada de la propia finca. Los conflictos civiles y la mala intervención de los Estados Unidos enturbiaron al país después de la partida de Somoza, pero todo se resolvió tiempo después con las elecciones democráticas de 1990. La paz ha permitido al país construirse una reputación como destino turístico de primer nivel. La playa de Montelimar es un buen ejemplo de su éxito. En ella aún permanecen intactos algunos recuerdos de los poderosos Somoza, como por ejemplo su antigua mansión, que se ha convertido en un elegante casino abierto las 24 horas durante los fines de semana.

La mayoría de los turistas pasan el tiempo descansando en su hamaca, admirando las doradas puestas de sol sobre el mar y nadando entre las olas espumosas que rompen frente a las playas de arena blanca. El personal del hotel está listo para ayudar en todo momento a sus visitantes, que pueden disfrutar de actividades deportivas como el surf, boogie boarding, voleibol y fútbol. Los huéspedes también podrán montar a caballo, jugar al tenis y al ajedrez gigante, por nombrar algunas de las actividades. Los golfistas pueden realizar un curso que acepta a principiantes y a expertos por igual. Los deportes y el relax son la combinación ideal para unas vacaciones perfectas en la playa de Montelimar.