4.5/5
589 reseñas
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Ourense es un destino para vivirlo. La ciudad de los puentes enamora por sus experiencias únicas: usar el bañador todo el año, comer pulpo los domingos, tomar tapas admirando las torres de la Catedral, aprovechar cualquier oportunidad para disfrazarse… Si se busca animación, Ourense es también el lugar perfecto. Ejemplo de ello son sus fiestas: Os Maios, Os Magostos o el famoso Entroido. Además, los días 7 y 17 de cada mes se celebra feria en la ciudad.
Alojarse en un hotel en Ourense durante su popular y particular ‘Entroido’ (Carnaval), es garantía de diversión y una oportunidad para dar rienda suelta a la imaginación a la hora de disfrazarse.
Sí, es obligatorio siempre llevar disfraz. Como obligatorio es degustar el producto típico de estas fechas, las orejas: dulces, elaboradas con huevos y harina; o de cerdo, cocidas y aderezadas con sal y pimentón.
El Carnaval es una celebración de gran arraigo y con una larga tradición en Ourense. El ambiente de la ciudad que inunda de color las calles refleja el homenaje al descaro y al buen humor que se pretende hacer con esta celebración. ¿No es suficiente? En el mes de septiembre se celebra también un Carnaval de Verano.
Insistimos en lo del disfraz. De lo contrario, es probable que quien no vaya disfrazado acabe pagando rondas en cualquier bar.
Dicen que el agua originó el primer asentamiento en este destino. Por eso, quien disfrute de una estancia en Ourense debe empaparse (en todos los sentidos) de la historia en torno a este elemento.
El recorrido comienza en las aguas termales de As Burgas, próximas al Barceló Ourense. De aquí, el visitante se adentra en la arteria verde de la ciudad: la ribera del río Miño. La Ruta Termal del Miño es un sendero peatonal de cinco kilómetros que ofrece la oportunidad de darse un baño en plena naturaleza, sea invierno o verano. Es también una senda perfecta para pasear, correr o ir en bicicleta.
En A Chavasqueira, se puede elegir entre un ambiente de inspiración japonesa o un baño bajo las estrellas. O Tinteiro es una fuente-mirador muy frecuentada por los vecinos de la ciudad; mientras que la zona termal de Muíño da Veiga cuenta con cuatro piscinas. Continuando la ruta se llega hasta las piscinas de Outariz, Burga de Canedo y la fuente de Reza.
En definitiva, un lugar ideal para disfrutar de un entorno envidiable en cualquier época del año. ¡Una cita obligatoria durante sus vacaciones Ourense!