No todo es sol y playa en Torremolinos. Este famoso pueblo andaluz es un lugar ideal para pasear y hacer senderismo, y no solo por su paseo marítimo de cerca de siete kilómetros de longitud. 

Al estar situado a espaldas de la Sierra de Mijas, en los alrededores del núcleo urbano de Torremolinos hay zonas de monte bajo y pinares de gran atractivo para caminar a no demasiada distancia del azul de las aguas del Mediterráneo. 

La cañada del lobo, La Gran Senda de Málaga o La Senda Litoral son tres recorridos aptos para todo tipo de personas a través de los que es posible descubrir la belleza del entorno natural agreste que envuelve a este rincón de la Costa del Sol. 

  1. Contexto natural de Torremolinos
  2. La Cañada del Lobo
  3. La Gran Senda de Málaga
  4. La Senda Litoral

Contexto natural de Torremolinos

Torremolinos está a poco más de 10 kilómetros del centro de la ciudad de Málaga, en la orilla oeste de la bahía de Málaga, dando la espalda a la Sierra de Mijas que cae hacia el mar Mediterráneo a modo de cuesta con monte bajo y pinares, y es conocido como Montes de Torremolinos. 

Este accidente montañoso de roca caliza, que forma parte de una serie de sierras litorales de la cordillera Penibética, se puede palpar ya en la parte alta de la localidad, al lado de la Villa Deportiva. Concretamente en el área de Los Pinares, conformada por un bosque de pinos que suponen un verdadero pulmón verde. 

Pero para los senderistas que buscan caminos de más de dos horas en plena naturaleza, describimos a continuación las principales rutas de senderismo por los alrededores de Torremolinos. 

La Cañada del Lobo

Merece la pena ascender hasta el mirador de La Cañada del Lobo para contemplar una de las mejores vistas de la Costa del Sol: el litoral, la Sierra de Mijas y hasta se divisa la silueta de Sierra Nevada en los días claros.  

Este recorrido de unos 5 kilómetros, dificultad moderada y asfaltado, se puede hacer saliendo desde Torremolinos puesto que está bien señalizado. También es posible arrancar desde el término municipal de Benalmádena. 

La ruta asciende entre matorrales bajos, pinos, encinas, alcornoques, acebuches y palmitos, que son especies típicas mediterráneas. Si tenemos suerte, podemos toparnos con cabras montesas, águilas, gavilanes o cernícalos comunes, entre otros animales. 

Ya arriba del todo, además del mirador y una escultura de un lobo que le da nombre a la senda, hay un albergue, un refugio y hasta un aula de la naturaleza. 

La Gran Senda de Málaga

La Gran Senda de Málaga es una ruta que discurre por toda la provincia andaluza y forma parte de la red nacional y europea de senderos. Son 35 etapas y una de estas es por Torremolinos, concretamente se trata de la penúltima, la 34, GR 249, Benalmádena-Alhaurín de la Torre

Durante 12,3 kilómetros y con un desnivel acumulado de 1060 metros (subidas y descensos), los senderistas que opten por esta ruta arrancan desde Benalmádena para ascender por la garganta del Tajod el Quejigal hacia el norte. Luego, encadenan diversos puertos que separan pueblos del interior para acabar descendiendo por un barranco al punto final de la etapa, que es Alhaurín de la Torre. 

La dificultad de esta senda es media y se estima un tiempo de cuatro horas para realizarla. Los viandantes caminan por antiguas veredas de arrieros, carboneros y gentes del campo con la vegetación propia de esta parte de la sierra (pinos, tomillo, romero y palmitos). 

La Senda Litoral

La Senda Litoral es un recorrido por toda la Costa del Sol, desde Manilva hasta Nerja, los pueblos que están en un extremo y otro. La etapa número 6 transita por el litoral de Torremolinos, pasando junto a las playas de Los Álamos, Playamar, El Bajondillo, La Carihuela, Playamar y El Saltillo. 

Los que opten por hacer este recorrido disfrutarán de las vistas al mediterráneo y de esta parte de la Costa del Sol durante cerca de seis kilómetros. Se estima un tiempo de dos horas y la dificultad es media, es decir, para personas de diferentes edades y condición física.