Los viajeros que llegan a Troya (Turquía) ya están avisados. Troya es una ciudad que en la actualidad está derruida, por lo que sólo encontrarán ruinas. Así que es importante echar mano de la ‘Iliada’ de Homero, un poema épico escrito en el siglo VIII a.C. y donde se cuenta la célebre guerra de Troya, para imaginar las historias (muchas) que allí sucedieron. Estas ruinas se hallan en un bonito paraje que, es cierto, tiene una historia monumental. Y supuestamente hay que hacer caso a Homero cuando dice que la guerra de Troya tuvo lugar a causa del rapto de la bellísima Helena, esposa del rey de Micenas, Menelao. Se sabe que el sitio de la ciudad duró 10 años, pero no se conocen muchos detalles sobre el final de la contienda. Existen muchos relatos sobre la guerra de Troya a cargo de otros autores griegos y romanos, como la ‘Eneida’ de Virgilio, además de numerosas representaciones en pinturas, cerámicas y esculturas antiguas.

  1. Dónde se encuentra la ciudad de Troya
  2. Cómo llegar a Troya
  3. Visita a las ruinas de Troya
  4. Réplica del caballo de Troya
  5. Qué más visitar en los alrededores de Troya

Dónde se encuentra la ciudad de Troya

La antigua ciudad de Troya se encuentra en la región turca de Anatolia, concretamente en un emplazamiento conocido como la colina de Hisarlik. Habitada desde el tercer milenio a.C., se halla en lo que hoy es la provincia de Canakkale, junto al estrecho de los Dardanelos y entre dos ríos: Escamandro y Simois. Además, tiene una posición estratégica en el acceso al mar Negro. En los alrededores está la cordillera del Ida y desde la costa es posible divisar la isla de Ténedos.

Hay que recordar que las ruinas de Troya fueron descubiertas en unas excavaciones que lideró en 1871 el alemán Heinrich Schiliemann después de que Frank Calvert realizara unas prospecciones previas a partir de 1865. Hoy, este sitio arqueológico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, por su importancia “para el entendimiento de la evolución de la civilización europea en un estado básico de sus primeras etapas”.

Cómo llegar a Troya

Troya se encuentra a unos 25 kilómetros de Canakkale, una pequeña localidad desde donde hay un servicio de transporte público hasta el sitio arqueológico de Troya varias veces al día. También es posible contratar una excursión organizada, bien desde Estambul o desde Canakkale.

Estambul se halla a 470 kilómetros de Troya, una distancia que se puede salvar en unas cuatro horas y media en vehículo privado y, al menos, una hora más si se viaja en autobús público. Por eso, si se desea viajar desde Estambul, lo ideal es hacer noche en alguna de las localidades vecinas de Troya, que cuentan con agradables hoteles y restaurantes.

Visita a las ruinas de Troya

Hay que tener en cuenta que la duración de la visita al complejo arqueológico de Troya es, por lo menos, de dos horas, incluso más si se incluye el Museo de Troya, inaugurado en el año 2018.

Para visitar las ruinas de Troya, lo mejor es seguir el itinerario marcado con flechas y paneles explicativos a lo largo del recorrido del recinto arqueológico. Y antes de comenzar la ruta, el viajero habrá pasado, por una zona de cafetería, librería y aseos, por si necesitara hacer uso de estos servicios.

El acceso al recinto se hace desde la Puerta Oriental, a la que se llega caminando por un pasillo y entre altas paredes. ¿Qué ver en Troya? Hay posibilidad de subir hasta un bastión de la muralla para disfrutar de una bonita panorámica de las ruinas, antes de acceder a la estructura metálica que guarda lo que queda de varias épocas distintas de Troya.

Es obligatorio contemplar el templo de Atenea, que fue destruido y reconstruido en varias ocasiones. De hecho, los romanos destruyeron buena parte de la acrópolis para hacer un templo digno de Atenea Ilias. También hay que visitar el odeón romano, el bouleterión y las termas, además del nuevo Museo de Troya, situado a las afueras de la cercana aldea de Tevfikiye.

Anfiteatro ciudad de Troya
Anfiteatro ciudad de Troya

Réplica del caballo de Troya

Lo que más llama la atención al entrar en el recinto arqueológico de Troya es una gran reproducción del célebre caballo de Troya. Según la leyenda, fue concebido por Ulises para introducir en él a un grupo de griegos dentro del recinto de Troya. Lógicamente, la mayoría de los visitantes de Troya se suben a la réplica del caballo para asomarse a sus ventanas y ser inmortalizados en una fotografía desde el exterior. En el malecón de la vecina Canakkale, también se puede ver el caballo de madera que se utilizó en la película ‘Troya’ (2004), dirigida por Wolfgang Petersen y protagonizada por Brad Pitt. Esta segunda réplica fue un regalo de la productora de la película, Warner Bros Pictures, a la ciudad y hoy se ha convertido en un icono turístico de Canakkale.

Qué más visitar en los alrededores de Troya

Una opción para disfrutar en los alrededores de Troya es, precisamente, visitar la localidad más cercana a las ruinas, Canakkale, y de paso contemplar el caballo de madera que se utilizó en la película ‘Troya’. Canakkale fue una fortaleza otomana que, después, se hizo célebre por su alfarería. Por cierto, en este municipio hay una buena oferta de hoteles, restaurantes y agencias de viaje.

Otra localidad interesante para visitar en las proximidades de las ruinas de Troya es Tevfikiye, donde se halla el nuevo Museo de Troya. Y Gallipoli es otro destino que conviene visitar si hay tiempo tras contemplar las ruinas de Troya. Aquí el emperador bizantino Justiniano I fortificó y estableció una importante base militar, además de estancias para almacenar el grano y el vino. En esta ciudad, tuvo lugar una importante batalla durante la I Guerra Mundial que fue llevada al cine en 1981 por Peter Weir. La película ‘Gallipoli’ estuvo protagonizada por Mel Gibson.