Puede que, a primera vista, no parezca que Marrakech sea una urbe de grandes museos. Sin embargo, esto no es del todo cierto. El atractivo principal de la Medina se encuentra en la espectacular Plaza Jemaa el Fna y en el palpitante zoco, pero ‘la Ciudad Roja’ tiene mucho más que mostrar. Entre sus atractivos están el Palacio El Badi, el Palacio de la Bahía y el Palacio Dar Si Said, donde, precisamente, se sitúa el Museo Dar Si Said que nos ocupa en este artículo.
Este museo, además de exponer una de las colecciones más ricas de objetos artesanales marroquíes merece un recorrido en profundidad. Es, asimismo, el museo más antiguo de la ciudad.
- La historia del Museo Dar Si Said
- El Palacio Dar Si Said
- Las obras y exposiciones del Museo Dar Si Said
La historia del Museo Dar Si Said
Como muchos otros edificios de Marrakech, Dar Si Said surgió como residencia de un alto mandatario. El origen de la construcción hay que situarlo en el siglo XIX, cuando el gran visir Bou Ahmed ordenó levantar un palacio para su hermano, el ministro de guerra Si Said Ben Moussa, de ahí el nombre.
Tras su muerte en 1900, el palacio lo ocuparon autoridades del Protectorado Francés. En el año 1932, el lugar pasó a estar en posesión de la Dirección General de Bellas Artes, que tomó la decisión de convertirlo en un museo. Así fue como se creó el Museo de las Artes Marroquíes, la denominación oficial.
El edificio fue restaurado entre 1978 y 1980, con el fin de adaptarlo mejor a su nuevo uso, y a la vez conservar el encanto arquitectónico original. Después, se han hecho otras remodelaciones menores en 2008 y en 2017. Es es el museo de Marrakech que mayor número de obras tiene en su colección.
El Palacio Dar Si Said
No cabe duda de que una de las característica más llamativas del Museo Dar Si Said es el palacio que lo alberga. Solo por ver las ricas estancias y su opulenta decoración ya merecería la pena cruzar sus puertas.
Esta antigua residencia tiene una gran extensión y está organizada en dos plantas. El interior cuenta con varios patios y pequeños jardines, bellamente ornamentados con azulejos. El patio central es el más llamativo, enmarcado por columnas que dejan clara la inspiración morisca, un suelo de mosaico y una fuente. Alrededor del patio se distribuyen las habitaciones, que funcionan como salas de exposición.
En el segundo piso, podrás admirar un extraordinario mobiliario, hecho en madera de cedro. Este fue tallado y pintado por artesanos de Fez, combinado perfectamente con el techo de madera de esta planta, que te dejará sin palabras.
El palacio se completa con un patio exterior, donde los senderos están igualmente decorados. Las flores y los cipreses invaden el espacio, creando un ambiente tranquilo donde descansar unos instantes.
Las obras y exposiciones del Museo Dar Si Said
Aunque uno de los encantos principales sea el palacio en sí mismo, la excelente colección del museo es una de las más destacadas de Marrakech. Dada la enorme cantidad de piezas expuestas, este es el museo más grande de toda la ciudad.
Se podría decir que es un homenaje a los maestros artesanos de Marruecos. El país tiene una tradición muy arraigada en cuanto a la artesanía, y las obras de arte que aquí se exponen es un buen modo de acercarse a su historia. Casi todos los objetos proceden de Marrakech, pero otros vienen del sur del país, de zonas del Alto Atlas o del río Tensift. Una de las colecciones más importantes es la de alfombras y tapetes. En particular, no te pierdas las que se hicieron a mano en la región montañosa del Alto Atlas, un trabajo realmente delicado.
Es un espacio estupendo para estrechar el contacto con la cultura bereber. Las prendas típicas, los tejidos y, sobre todo, la joyería, te darán un idea mucho más clara de la vida cotidiana en Marruecos hace cientos de años. Las tallas en madera y las armas completan este muestrario.
Una de las piezas más curiosas es una pila de abluciones, perteneciente al siglo X, traída directamente desde Córdoba, fechada en la época del Califato Omeya. Junto a esta, el objeto más antiguo del museo es un cofre, que data del año 1000.
La bella colección de puertas y ventanas talladas es un ejemplo más del impresionante trabajo de los artesanos. Verdaderos tesoros que, gracias al Museo Dar Si Said, tienen hoy la consideración que se merecen.
