Recorrer el Museo del Prado en una visita guiada es una de las mejores decisiones que se pueden tomar en cualquier viaje a Madrid. Caminar por este edificio del siglo XVIII cargado de historia y admirar los tesoros que se exhiben en cada sala es un privilegio que no se debe dejar pasar en la capital española. Entre las grandes obras expuestas se encuentran lienzos de Velázquez, Goya, Rubens, Tiziano, El Greco y El Bosco. Algunas de las joyas que se muestran en sus salas ya forman parten de la Historia del Arte que todos hemos estudiado en nuestros años escolares. Reconocer estas maravillosas piezas es algo muy emocionante (‘Maja vestida’ y ‘Maja desnuda’ de Goya, ‘La Fragua de Vulcano’ de Velázquez, o ‘David y Goliat’ de Caravaggio).
Acompañado por un guía profesional lograrás desentrañar los secretos de la enorme colección que atesora El Prado y que se compone de más de 8.000 pinturas, más de 9.000 dibujos, más de 950 esculturas y más de un centenar de mapas. Todo esto, sin contar todo lo que se guarda en los fondos del museo y que ni tan siquiera puede estar en el edificio principal. Conocer los entresijos de cada obra expuesta, de los grandes artistas que la han realizado y de la evolución del arte depara momentos inolvidables.
Además, una gran ventaja de hacer esta visita guiada al Museo del Prado es que no tendrás que preocuparte de adquirir entradas ni de hacer colas, porque todo está incluido. Y los niños hasta 3 años pasan gratuitamente.
