Roma Moderna
Las rutas clásicas en Roma son de obligado cumplimiento. No puedes visitar la Ciudad Eterna sin visitar sus grandes símbolos, como el Coliseo, el Foro Romano, el Vaticano o la Plaza Navona. Sin embargo, a pesar del colosal patrimonio histórico de una de las ciudades más turísticas del mundo, no todo son vestigios de un pasado lejano.
Disfrutar de la urbe más contemporánea y cosmopolita también es posible, por lo que te damos algunos de los puntos más destacados en este sentido. Esta metrópoli se ha adaptado a la perfección al siglo XXI y su oferta cultural está llena de posibilidades.
Para empaparte de arquitectura y arte de vanguardia puedes dirigirte al barrio Flaminio, en la zona norte de Roma. Se encuentra entre la Vía Flaminia y el río Tiber, y es una de las principales zonas residenciales con muchos sitios de moda. Aquí podrás contemplar el Museo Nacional de las Artes del siglo XXI, conocido como MAXXI, cuyo edificio fue diseñado por la reconocida arquitecta Zaha Hadid. Otra construcción destacada es el Auditorio Parco della Musica, obra de Renzo Piano y con un interior realmente espectacular.
Desde este barrio podrás cruzar el sorprendente Puente de la Música, uno de los últimos que se han construido en la ciudad, inaugurado en 2011. Un moderno diseño con el acero y el hormigón armado como protagonistas dan a este puente una gran ligereza. Tras cruzar te hallarás en el Foro Itálico, un enorme complejo deportivo en la base del Monte Mario levantado en 1932 y precedente de la arquitectura fascista italiana.
Hablando de arquitectura fascista, otra parada obligatoria para conocer las obras de la primera mitad del siglo XX en Roma es la Esposizione Universale Roma, EUR, convertida hoy en una zona suburbana y un centro de negocios. Edificios llamativos como el Museo de la Civilización Romana o el Spazio Novecento se hallan en este lugar. Este es un claro símbolo vanguardista con diversos ejemplos de arquitectura racionalista.
La Roma más colorida y original puedes localizarla en algunos barrios donde se han proyectado muchas muestras de arte urbano y grafitis, sobre todo los distritos del sur que se desarrollan a lo largo de Via Tuscolana, una de las calles más largas de la capital. El Barrio de Quadraro tiene su propio museo gratuito y al aire libre de arte urbano, MURo. Los grafitis de Light Up Torpigna, en el barrio de Tor Pignattara, son otro increíble ejemplo de esta tendencia. En el barrio de Tor Marancia el arte callejero inunda cada rincón.
Para descubrir una Roma joven y moderna son varias las zonas a las que puedes acudir. Si estás interesado en una tendencia más hipster debes ir a Pigneto, uno de los barrios más cinematográficos, inundado de cafés, bares y galerías de arte. Si eres un fan de Pasollini tienes que visitar el bar Necci del 1924, donde el director rodó su primera película, Accattone. Prueba un buen plato de pasta cacio e pepe, tómate un delicioso cappuccino, acude a la terraza del Cargo o visita sus variopintas tiendas de ropa vintage.
Ostiense y Garbatella, dos antiguas zonas industriales de la periferia de la ciudad, también son hoy en día barrios alternativos con locales modernos y fábricas convertidas en espacios culturales. Visita la bella Central Montemartini, donde la que antes era una planta termoeléctrica ahora es el hogar de piezas de los Museos Capitolinos. Recorre las fachadas decoradas con impresionantes grafitis. Sorpréndete con el Puente Settimia Spizzichino, una obra contemporánea de acero curvado que lleva el nombre de la única judía romana que sobrevivió a Auschwitz. Deja que te inunden los sabores italianos en la sede romana de Eataly. Prueba las pizzas creativas de Gazometro 38 y cena entre jóvenes empresarios o artistas. Disfruta del ambiente nocturno en Caffè Letterario y escucha música en directo. En definitiva, conoce la Roma auténtica en un ambiente relajado entre los encantadores edificios ocres.
Y si de autenticidad va la cosa, no podemos dejarnos en el tintero Testaccio, uno de los barrios más singulares de la metrópoli, que une pasado y actualidad. Surge a finales del siglo XIX como una zona residencial para trabajadores. Poco a poco el distrito se va modernizando y el arte comienza a inundar las calles. Hoy en día la gran pirámide Cestia, de estilo egipcio, es la que da la bienvenida a este peculiar barrio que está fuera por completo de las rutas turísticas. En sus trattorias puedes comer bien y barato, mientras que en el mercado vivirás el auténtico bullicio romano. En Mattatoi, un antiguo matadero, hallarás una sede del Museo MACRO. En el cementerio protestante se encuentran las tumbas de John Keats y Percy Shelley, entre otros. La vida nocturna por excelencia también tiene aquí su lugar, desde grandes discotecas a bares más tranquilos, sobre todo en la zona de la Estación Ostiense. Una Roma diferente, moderna, efervescente y alejada de los convencionalismos.