Costa Oeste de Sri Lanka
La Costa Oeste de Sri Lanka es la zona más densamente poblada y visitada de este pequeño país asiático. La razón principal es que aquí es donde, precisamente, está su capital ejecutiva, judicial y económica: Colombo. En torno a esta ciudad de unos 600.000 habitantes, se ha desarrollado un gran cinturón metropolitano con varos núcleos residenciales.
Aun así, no hay dudas sobre la belleza de la Costa Oeste, salpicada por playas de auténtico ensueño. Esto explica que también en esta zona de Sri Lanka se encuentren algunos de sus centros turísticos más conocidos y deseados por los visitantes extranjeros.
Se calcula que en la Costa Oeste y sus inmediaciones viven unos seis millones de personas. Es decir, alrededor de una cuarta parte de la población total de Sri Lanka. Como decíamos, muchos de ellos concentrados en Colombo, ciudad que, pese a su antigüedad (su puerto es conocido y explotado desde hace más de 2.000 años) presume de su fisonomía actual, con grandes rascacielos de oficinas y torres como la emblemática Lotus Tower. Ésta, con sus 350 metros de altura, tiene un mirador que es el mejor lugar para entender tanto la ciudad como su entorno marino.
Para tomar el pulso a la vida urbana se puede visitar el mercado de Pettah y, a la caída de la tarde, darse una vuelta por el paseo marítimo (Galle Face Green). También muy recomendable es el templo de Gangaramaya (finales del siglo XIC), de gran importancia para la población de la Costa Oeste de Sri Lanka y para los creyentes de todo el país.
Más allá de Colombo, en la Costa Oeste de Sri Lanka hay otros lugares de relevancia. Por ejemplo, muy cerca del aeropuerto internacional está la localidad de Negombo, bañada por canales que se pueden recorrer en pequeños barquitos de madera. Junto a ellos se sitúan el rico y colorista templo de Sri Singama Kali Amman, hinduista, y el de Angurukaramulla, budista.
En esta misma localidad de la Costa Oeste de Sri Lanka merece la pena acercarse a su playa urbana, para disfrutar de la autenticidad de la vida local, los pescadores y vendedores ocasionales de pescado seco, especias y otros alimentos. Aunque, para darse un baño, la opción son los arenales de Marawila, Uswetakeiyawa, Seeduwa o Waikkal, muy atractivos y tranquilos.
Muy frecuentada tanto por la población local como por visitantes extranjeros es la playa de Mount Lavinia, población donde se encuentran el templo budista de Bellnawila Rajamaha Viharaya, el Zooológico de Sri Lanka y el curioso Museo de las Fuerzas Armadas.
Para amantes de la naturaleza, hay en la Costa Oeste de Sri Lanka varias zonas protegidas. Una buena referencia es el entorno del núcleo turístico de Kalpitiya, cuya costa es punto habitual de paso de cetáceos. Entre ellos, ballenas jorobadas, cachalotes y delfines, muy abundantes estos últimos.
Por su parte, la costa de esta zona se caracteriza por la abundancia de lagunas salinas, marismas y manglares, en los que habita una gran variedad de avifauna. Muy cerca están las recomendables playas de Kudawa y Alankuda.